NIF (Número de Identificación Fiscal)

A los ciudadanos portugueses ya todos los ciudadanos extranjeros que pretendan residir o realizar una inversión en Portugal.

El número de contribuyente portugués para personas físicas se conoce como NIF (y para personas jurídicas como NIPC, que es también el número de identificación del registro mercantil).

Los ciudadanos no residentes en la Unión Europea, Noruega, Islandia o Liechtenstein, si tienen una relación jurídica fiscal con Portugal, están obligados a designar un Representante Fiscal, que puede ser una persona física o jurídica siempre que tenga domicilio o residencia en territorio portugués.

Ejemplos de relación jurídica tributaria: apertura de una cuenta bancaria, participación accionaria en una sociedad comercial, adquisición de un vehículo o inmueble, contrato de trabajo o el ejercicio de una actividad profesional independiente.

El representante fiscal deberá mantener la representación durante el tiempo necesario, sin que sea necesario constituirlo, a efectos fiscales, como administrador de bienes, derechos o negocios, ni conferir facultades para administrar bienes, incluidos valores, bienes u otros derechos de los que sea titular.

El representante fiscal es fundamental para alertar al representante de las comunicaciones de la autoridad tributaria y evitar incurrir en responsabilidades, ya que los plazos son cortos y las multas pueden ser elevadas, es decir, es una responsabilidad a efectos de correspondencia.

En algunos casos, es posible prescindir del representante fiscal siempre que las notificaciones electrónicas estén activadas en el sitio web de la Autoridad Tributaria o Caja Postal “CTT” – el cliente consultará periódicamente las notificaciones para confirmar su recepción oportuna.

Nota: en la inversión inmobiliaria tanto el adquirente como el cónyuge (aunque no adquieran y aunque el régimen de bienes sea de separación total) deben tener NIF.