Cuando llega el momento que muchos ciudadanos de terceros países anhelan—el momento de obtener el permiso de residencia—a menudo surge una serie de nuevas preguntas, particularmente sobre la duración de la estancia y las razones que podrían poner en peligro la retención del permiso de residencia adquirido.
Es importante saber que, a pesar de la finalización del proceso de legalización, el residente extranjero debe continuar cumpliendo ciertas reglas de estancia para asegurar que su permiso de residencia no sea cancelado.
Normas para conservar el Título de Residencia
Según la ley, durante el período de validez del permiso de residencia temporal, su titular no debe ausentarse del país por un período superior a seis meses consecutivos u ocho meses no consecutivos. Esto significa que, al otorgar un permiso de residencia temporal válido por 24 meses, el residente extranjero en Portugal debe permanecer en el país por un período mínimo de 16 meses, el cual debe extenderse a 18 meses si el período de ausencia es continuo.
Además, después de la primera renovación del permiso de residencia temporal, que entonces tiene un período de validez de 36 meses, el titular de un permiso de residencia debe permanecer en Portugal por al menos 28 meses, extendiéndose a 30 meses si el período de ausencia es continuo.
La concesión de la residencia permanente también requiere el cumplimiento de los períodos de estancia en el territorio nacional. Según la ley, el titular de la residencia permanente no puede estar ausente del país por un período superior a 24 meses consecutivos o 30 meses no consecutivos.
Esto significa que, durante los 60 meses del permiso de residencia permanente, el residente extranjero en Portugal debe estar en el territorio nacional por al menos 30 meses o, si la ausencia es continua, por al menos 36 meses.
Título de Residencia – Excepciones a la obligación de permanecer en Portugal
El incumplimiento de estos períodos de estancia en Portugal puede llevar a la cancelación del permiso de residencia. Sin embargo, existen varias excepciones a la obligatoriedad de cumplimiento de estos períodos y, al ser excepciones, no resultan en la cancelación del permiso de residencia.
La existencia de razones poderosas de índole personal, familiar o profesional que necesiten la ausencia del país por períodos superiores a los enumerados no perjudican la retención del permiso de residencia del ciudadano extranjero. No obstante, recae sobre el interesado el deber de comunicar a la AIMA – Agencia para la Integración de Migraciones y Asilo – esta ausencia, ya sea previamente o, si no es posible, posteriormente, y demostrar que continúa considerando a Portugal como su país de residencia donde pretende permanecer.
Por ejemplo, si después de la concesión del permiso de residencia temporal válido por dos años, el titular del permiso de residencia que tiene negocios en el extranjero se ve obligado a ausentarse del país por un período de 10 meses, su permiso no será cancelado si la ausencia se justifica ante la AIMA.
Cada situación y excepción debe ser analizada caso por caso, teniendo en cuenta que una ausencia justificada que se prolongue más allá de los períodos enumerados en la ley siempre será la excepción y no la regla.
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